¿Sabías que Ucrania tiene la mitad del gas neón que es básico para hacer chips semiconductores? En otras palabras, la invasión de Ucrania por Rusia puede provocar otra crisis de semiconductores.
El pasado 2021 hubo un desabastecimiento de los semiconductores lo que provocó una crisis industrial en todos los sectores. Aparentemente a inicios del 2022 hubo una vuelta a la normalidad, pero la crisis de Ucrania promete otra crisis en el futuro.
¿Otra crisis de semiconductores provocada por la invasión rusa?
¿Por qué? Lo primero de todo es por el neón, del cual Ucrania alberga el 50 % del planeta? Este gas noble es fundamental en la construcción de los semiconductores.
Estos materiales son importantes ya que son un componente esencial de los dispositivos electrónicos. Son necesarios a la hora de la fabricación de casi dispositivo electrónico, desde teléfonos, centralitas de coches, aparatos militares y cualquier otro aparato que sea electrónico.
En otras palabras, los semiconductores son imprescindibles en sectores tan importantes como las comunicaciones, la informática, la sanidad o la defensa militar, por citar unos cuantos.

Aunque el principal de un semiconductor es encender y apagar el flujo de electricidad, también ayuda a a regular el flujo de electricidad. Esto se debe a que los semiconductores tienen una gran conductividad.
Estas cualidades hacen de materiales como el silicio o el germanio una pieza imprescindible en el engranaje de la fabricación de cualquier aparato electrónico.
El neón, los microchips, los semiconductores y la guerra en Ucrania
En 2021, la escasez de chips fue tal que afectó a empresas de coches como General Motos o Stellantis (PSA Peugeot-Citroën, Jeep, Lancia, Maserati, entre otros) que tuvieron que cerrar fábricas.
Lo mismo sucedió con Apple. En 2021 la empresa de la manzana fabricó menos iPhones de lo previsto, unos 10 menos, debido a la escasez de chips, según informó Bloomberg.
¿Y esto qué tiene que ver con Rusia y Ucrania? Pues que la guerra en Ucrania amenaza con repetir la crisis de semiconductores del año pasado.
El motivo es que la antigua república de la URSS es un punto estratégico en la fabricación de semiconductores. Esto se debe a que aproximadamente el 50 por ciento de este gas procede de Ucrania, según una información recogida por el medio Wired.
Los datos recogidos por Wired, sostienen que sí hay motivo para este nerviosismo. Y es que la industria del gas de Ucrania se creó inicialmente para aprovechar los gases producidos de la fabricación rusa del acero.
Ucrania lo que hace es capturar este gas, purificarlo y venderlo a través de empresas como Cryoin. Esta compañía, al igual que otras en Ucrania como ASML importan este gas.
Es cierto que se puede conseguir neón de otros países, pero abastecerse de ellos no será fácil ya que cualquier interrupción en Ucrania afectará a otros fabricantes en otros lugares.
Si bien es cierto que es pronto para afirmar que existirá una falta de gas en el futuro, lo cierto es que de alargarse la guerra podría suceder algo parecido a lo que sucedió el año pasado. Es decir, otra crisis de semiconductores.